Día: julio 4, 2012
Ana de Juan Amat y Francisco Collado presentan una ponencia sobre los indignados
Ana de Juan Amat y el politólogo escribiente presentamos este viernes, dentro del I Congreso de Internacional de Comunicación Política y Electoral, una comunicación sobre la comunicación política de los movimientos 15-M y Democracia Real Ya. Por lo que, se observan aspectos como los temas abordados en su agenda política, los efectos de su mensaje y la cercanía que han mantenido con las distintas opciones políticas durante las elecciones generales de 2011.
¿Por qué el Congreso? En la última década hemos asistido a un cambio radical en la concepción sobre las estrategias de comunicación en el ámbito de la política; y a una nueva forma de diseñar y de poner en práctica las campañas electorales por parte de los partidos.
Este giro se ha traducido en la adopción de modelos sustentados en nuevas formas de comunicación, en nuevos tipos de mensajes, y en la incorporación de un conjunto de técnicas para conocer cada vez más y mejor los públicos, y su reacción ante los discursos generados por los políticos, los partidos y los propios medios.
En este escenario se enmarca el I Congreso Internacional en Comunicación Política y Estrategias de Campaña, que tiene como eje central dos de los fenómenos más interesantes de los últimos años en el campo de la planificación y gestión de la comunicación en campaña: el líder como factor de voto y la centralidad cada vez mayor de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
El objetivo principal de este I Congreso es propiciar un foro de intercambio de ideas entre estudiantes, investigadores y profesionales, que permita un acercamiento entre las distintas perspectivas que componen la disciplina, con el ánimo de proponer desafíos sobre los que construir la comunicación política y las estrategias de campaña, no sólo del presente, sino también del futuro.
El cuento de Bankia
Los “pro-hombres” se han convertids en ranas. A la inversa de los cuentos para infantes. Los ex ministros populares, Rato y Acebes; el antiguo presidente de la Confederación de Empresarios y el archifamoso MAFO convertido en testigo. Ellos junto a otra miríada de consejeros del PSOE e IU son los protagonistas de la tragedia de la antigua Caja Madrid. Un drama que nada tiene para ellos, actores de la chanza financiera, pero que mucho afecta a los engañados por este fraude. Entre imputados y disgustados anda la cosa.
Se cuenta que los miembros del consejo de Administración de Bankia iban a veces y otras se quedaban a medio camino. Lo que incluía sus dietas tanto si se perdían como si llegaban. Y así, el cuento del nunca acabar porque parece imposible que terminasen una reunión con alguna conclusión en claro o en consenso entre todos ante la ausencia del quórum.
La cuestión en nuestro país no es la clase política en esta desfachatez bancaria. El problema real está en determinados políticos que una vez finalizado el trayecto pasan a la empresa privada o a la banca. Y así, cambian la profesión de político por la de tecnócrata, o mejor dicho de lobbista, puesto que una vez en el mercado, los contactos con las altas esferas y la capacidad de influencia se convierten en una mejor carta de presentación que el currículum vitae.
Por lo tanto, si pretendemos seguir en una economía de mercado, para volver a evitar viejos errores sería recomendable adoptar algunas medidas. Limitar no sólo la pensión de los políticos, sino también su ejercicio profesional posterior a la labor representativa. Algunos dirán que se atenta contra la libertad de un sujeto, pero su competencia monopolística en el ámbito de la influencia bien atenta contra la igualdad de otras personas que también tienen derechos y pudieran estar mucho mejor capacitadas.